El Salvador tendrá elección presidencial el próximo domingo tres de febrero de 2019 y si es necesario se ira al balotaje el 10 de marzo, para elegir a sus próximos gobernantes por un periodo de 5 años. Estas elecciones tienen 3 elementos muy interesantes y dignos de analizar que son el surgimiento de una figura política prometedora, el rompimiento del bipartidismo y la anulación de los argumentos ideológicos radicales.
Si no pasa nada extraordinario el empresario y ex alcalde de Nuevo Cuscatlán y de San Salvador, Nayib Bukele se convertirá este año en el presidente más joven de la Historia de El Salvador. Esto debido a que se mantiene como uno de los favoritos en las encuestas de opinión para llevarse la victoria por la presidencia de ese hermoso país. Esto es un claro ejemplo de una innovación política resultado del buen manejo de su Imagen Pública, y de cómo se ha trabajado de forma extraordinaria su marca personal.PUBLICIDAD
El exalcalde logro trabajar muy bien en dos aspectos para construir su imagen, ambos son resultado de una visión política proyectada con mira presidencial que se empezó a trabajar desde el primer momento de su carrera política. El primer aspecto fue el trabajo de “R” conocido como reconocimiento y el segundo aspecto es el trabajo de “P” que es la nomenclatura de posicionamiento, elementos que han logrado generar ese efecto demoledor y contundente de apostar por la juventud.
Bukele ya es un ganador porque ha sabido capitalizar el rechazo hacia una clase política tradicional, y ahora su juventud, su ímpetu, su jovialidad han creado el surgimiento de una figura política con una tendencia creciente debido a su buen manejo en materia de comunicación. Él como joven se convierte ya en una esperanza, y en aspectos meramente emocionales, carismáticos, que pueden ser parecidos a la marca de Obama, porque es capaz de mover a la gente. Así como lo escucha, aunque no existe el punto de comparación real, esto es así porque se nota el buen trabajo en su imagen que puede ser analizado desde el punto de vista del “Ser” que trabaja dos variables como el “saber ser” y el “saber estar “.
Otro de los factores es que aunque El Salvador tiene un sistema multipartidista, el rompimiento de la tendencia del bipartidismo político tradicional en El Salvador entre ARENA y el FMLN ya es algo a lo que hay que ponerle mucha atención. Defenestrado del FMLN, Bukele surge con un partido disidente de ARENA como lo es la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA) que ahora presenta un liderazgo con sangre nueva, alguien fresco que se abrió paso entre los señalamientos cruzados entre ARENA y el FMLN por temas de corrupción.
El último elemento de análisis es que ahora que Bukele es candidato de la GANA (centro derecha) es paradigmático pues al haber construido su carrera política con el FMLN (izquierda), ha demostrado que etiquetar ideológicamente a un candidato muchas veces no sirve de nada, más que para generar rechazo y división por el tan solo uso de los radicalismos políticos.
Bukele logro capitalizar el tema racional, es decir de sentido común, sobre el componente ideológico, algo que demuestra que la teoría de los extremos ideológicos no es tan importante como muchos piensan. Este joven empresario ya es objeto de estudio y sobre todo un ejemplo para Centro América y Latinoamérica que los jóvenes son el oxígeno para los sistemas políticos tradicionales que no comprenden la importancia de la innovación en la política, así como el buen manejo de la imagen pública y la construcción de la marca personal.
En definitiva Nayib Bukele está cerca de hacer historia, pero que quede claro no es un redentor, sino es producto de acciones coordinadas, planificadas y de una visión política que está muy bien trabajada, insisto desde el punto de vista de la imagen pública y la marca personal. Dicho esto, no se trata de que sea la mejor opción o no, para eso cada ciudadano salvadoreño tendrá su propia opinión, se trata de una innovación política prometedora a la que hay que prestarle muchísima atención.
República es ajena a la opinión expresada en este artículo